ENTRE GALLOS, PALOMAS Y ZOPILOTES: UN ÁGUILA REAL.

Verdades que acomodan e incomodan de Lorena...

Lorena Reséndiz Mendoza

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06/03/2023.

En esta columna de “Cosas que acomodan e incomodan de la maestra Lorena” retomo este título del libro del Lic. Carlos Tizoc Mondragón Barrón, que presentó el 16 de febrero en el Portal del Diezmo, y al cual, asistieron grandes personalidades y también como dice, amigos falsos y enemigos verdaderos, gente que conoce su trayectoria y el trabajo que ha hecho.

Realizar una autobiografía no es fácil, en la memoria se guardan tantas cosas que quiere uno sacar, recuerdos gratos que aún se pueden oler, saborear, y otros que aún están ahí, que duelen, que laceran y que no se olvidan. Es una aventura atreverse a escribir un libro, desde que la idea se posesiona de la cabeza, también intervienen los sentidos, el corazón y hasta el alma mete su cuchara. Las ideas empiezan a fluir y, a veces, son tantas que cuesta trabajo ponerlas en orden, buscar que debe aparecer primero, cómo empezar el relato, si todas las historias vividas son importantes, no una más o una menos que deba quedar en segundo orden, sin embargo, conozco parte de la trayectoria de vida de Carlos, que estoy segura que en un libro no alcanzan las páginas para contar tantas anécdotas, tanta historia, tantas aventuras, tantos momentos que han forjado su vida.

Estoy segura que vendrán más libros, toda una vida no puede resumirse en un libro, habrá otras historias que están asomando la nariz por ahí y le dicen en el oído, con un poquito de reproche ¡Hola! Yo también quiero aparecer en unas líneas, quiero que escribas algo de mí, recuerdas que …

Es un trabajo arduo, buscar el tiempo para escribir, el diseño, en quién confiar para que el libro salga a la luz, sin embargo, lo que tiene que ser, será y el universo conspira para que se haga realidad, sin embargo, como escritor independiente no es fácil que los libros sean editados y que lleguen a muchas manos, también, duele y cuesta admitir que pocas personas se interesan en leer y sobre todo, lo más difícil, apoyar al escritor que se atreve a dejar huella en un libro que no se perderá en el olvido, como se pierden las memorias cuando no son plasmadas. Escribir un libro es una aventura extraordinaria, sobre todo, porque muchos lo piensan, lo sueñan, pero no se atreven y, pocas veces apoyan al que se atrevió, critican y desdeñan, pensando que cualquiera pudo hacerlo, y no, no queridos lectores, no cualquiera abre su vida a los demás a través de un libro, eso solo lo hacen aquellos que han sabido vivir, que tienen cosas importantes para contar, y, sobre todo, que no son cuentos chinos, en esas páginas está contada la historia de alguien que en este universo, encontró su camino, que sus huellas las contarán, aparte de él, otras generaciones, otros libros, otras vidas.

Mis felicitaciones al Lic. Carlos Tizoc por creer en él, por hacernos partícipes de su historia, por abrir en este libro, páginas de su historia, de su vida, de su trayectoria, de los caminos andados. A ustedes, que leen estas líneas, los invito a leer, más que leer, a saborear, oler, reírse un poco, asombrarse de lo que guarda, una excelente manera de demostrar la empatía, el apoyo, la amistad y el don de gentes, es apoyar a los escritores que tienen maneras de contar quienes son, de donde vienen y a donde van.

Deseo que entre Gallos, Palomas y Zopilotes, un águila real como es Carlos Tizoc Mondragón, siga ese vuelo, porque aún mucho más para vivir y por contar.